Leer Capítulo Completo
Mas los ojos de ellos estaban embargados, para que no le conociesen.
Y aconteció que yendo hablando entre sí, y preguntándose el uno al otro, el mismo Jesús se llegó, é iba con ellos juntamente.
Y díjoles: ¿Qué pláticas son estas que tratáis entre vosotros andando, y estáis tristes?