Leer Capítulo Completo
Haz resplandecer tu rostro sobre tu siervo: Sálvame por tu misericordia.
En tu mano están mis tiempos: Líbrame de la mano de mis enemigos, y de mis perseguidores.
No sea yo confundido, oh Jehová, ya que te he invocado; Sean corridos los impíos, estén mudos en el profundo.