Leer Capítulo Completo
Y espigó en el campo hasta la tarde, y desgranó lo que había cogido, y fué como un epha de cebada.
Antes echaréis á sabiendas de los manojos, y la dejaréis que coja, y no la reprendáis.
Y tomólo, y vínose á la ciudad; y su suegra vió lo que había cogido. Sacó también luego lo que le había sobrado después de harta, y dióselo.